sábado, 7 de marzo de 2009

A veces el reloj se vuelve tan continuo que me empieza de parecer ridículo el tiempo que paso descifrándome
como tan grande el espacio que no me importan las ausencias y carencias de amaneceres soleados estos días de noviembre

…creo que llegué al limite…

redescubrir mi pasado me parece algo

ahora

fuera de mi alcance

no poder preguntarme el porqué me aturde
como pitillo estridente en los oídos
no creo poder recobrar mi capacidad para recordarlo ni ahora ni nunca
todo por este maldito vicio de pensar mucho las cosas y depurar las que ya no quiero ver…

No hay comentarios: