martes, 11 de mayo de 2010


Me palpo los párpados a oscuras,
a tientas,
la nariz
los labios.
Pronto, los vacios existenciales comenzarán a ser un simulacro.
Sensación de morder superficies lisas.
Los tragos que se escurren amargos desde la frente.
Antes no estabamos tan locos para prometer semejantes cosas...
antes eramos cuerdos y sensatos, no nos haciamos heridas a escondidas
invadidos por los mismos males,
apenas rozabamos el suelo con la punta de los dedos... ahora todo se trata de abrir y cerrar los ojos
de abrir y no la boca...
peliagudo cuando uno comienza a sentirse solo...
peliagudo cuando uno cree que ama.
PELIAGUDO CUANDO UNO CREE QUE AMA,
como quien se acostumbra a pensar haber tomado una buena desición.

A veces, tengo la certeza de permanecer en un intento constante de alejarme tanto de la orilla para caer al precipicio...
A veces sólo quisiera volver de donde vengo...

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